De algo sí puedes
estar siempre seguro: nunca se pierde una oración o no es escuchada, aunque no
recibamos exactamente lo que hemos pedido.
Muchas veces no nos percatamos de los bienes recibidos, o no los entendemos o no estamos de acuerdo con ellos.
Muchas veces no nos percatamos de los bienes recibidos, o no los entendemos o no estamos de acuerdo con ellos.
BRINDALES UN ESPACIO DENTRO DE TI
Los ángeles les gustan los pensamientos de paz y amor.
Comunícate con los ángeles unos minutos cada día. Busca un lugar donde puedas estar sólo, en silencio y
en calma, imagínate a tu ángel favorito y háblale, cuéntale tus inquietudes,
como si lo hicieras con tu mejor amigo, luego escucha, permanece a la espera de
los pensamientos que ellos pondrán en tu mente.
Cada día se fortalece tu relación con los ángeles, tendrás
más energía positiva dentro de ti, crecerá tu ser espiritual.
HAZ TUS ORACIONES DIARIAS
Puedes utilizar decretos y afirmaciones. REPITELOS TRES
VECES.
- Los decretos son oraciones estructuradas a los ángeles les encanta que las repitamos.
- Las afirmaciones son cortas pero poderosas, más rápidas, fáciles de recordar y repetir cada vez que les necesitemos, o para estar permanentemente en contacto con ellos, darles gracias o saludarles.
Recítalos en casa, ante tu altar personal, cuando viajes, en
cualquier emergencia, ellos siempre estarán pendientes de ti y serán felices de
que los estés invocando y confiando en ellos.
UTILIZA EL NOMBRE DE DIOS
Recordemos que por encima de nuestras necesidades y de la buena
voluntad de los ángeles para atendernos, estará siempre la voluntad de Dios.
SÉ ESPECÍFICO Y VISUALIZALO
Este punto requiere de una especial atención. Los ángeles
responden de manera más rápida y directa a una solicitud específica, cuánto más
clara y detallada sea tu solicitud, tanto más exacta y específica será su
respuesta; Visualiza en tu mente lo que estas pidiendo.
Es muy importante que tú
hagas tu mejor esfuerzo, busques soluciones,
estudies, trabajes e incluso
debes buscar ayuda profesional cuando el caso lo amerite.
Los ángeles están aquí para ayudarte, no para reemplazarte,
para hacerte la tarea ni para alcahuetear pereza, desgano o negligencia.